En la década de los 60, se inició la venta de los primeros lotes; no obstante, luego fueron vendidos tras los problemas que tuvo el fundador, Fernando Wiesse, con el gobierno central.
Posteriormente, algunos vecinos de la zona compraron los terrenos que quedaban ahí; mientras que, otros llegaban siendo migrantes o como reubicados del Puente Huáscar o Cantagallo.
Asimismo, posee su propio centro comercial llamado Alameda Plaza.
Finalmente, la localidad se halla servida por una estación de la línea 1 del Metro de Lima y Callao, la estación San Carlos.
Cuyo nombre se debe a la urbanización homónima, colindante con la localidad.