Hay constancia de poblamientos ya en época altomedieval en torno al siglo V vinculado a fenómenos de tipo heremítico o monacal de tradición visigótica aunque bien podría ser un asentamiento de carácter laico.
Entre sus cuevas, se han encontrado cerámicas de pasta gris, hechas a mano en tornos lentos, de mala cocción, toscas, aunque pueden también ser de épocas posteriores debido a un escaso desarrollo tecnológico.
Sin embargo, su semejanza a piezas visigóticas tardorromanas hace pensar que son hábitats tradicionales que han perdurado siempre en la montaña debido a un fuerte arraigo de las estructuras sociales autóctonas.
[5][6][7] En cuanto a las fuentes en papel de esta época del siglo XIX en referencia directa a este pueblo, se encuentra el Diccionario geográfico-estadístico de España y Portugal:[8] En el tomo VIII del Diccionario geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de Ultramar se describe así a Canseco, obra impulsada por Pascual Madoz a mediados del siglo XIX:[4] Por otra parte, lo encontramos definido según el Diccionario universal de historia y de geografía de 1847 como presenta el texto:[9] En otra de las tantas obras geográficas que encontramos en 1864, vemos como aparece mencionada la localidad:[10]
A partir de esta iniciativa se han establecido lazos con las siguientes iglesias: