Estas llevan camisetas blancas o de colores claros, sin sujetador, top ni otra prenda en el torso.
Una vez mojadas, las participantes desfilan, posan y bailan ante el público, intentando provocar una reacción positiva.
Esta reacción más o menos favorable de los espectadores, junto con el veredicto del jurado, servirán para determinar quién es la ganadora.
En concursos más atrevidos, las participantes se suben o desgarran estratégicamente las camisetas para mostrar sus vientres y/o parte de los pechos.
En estos casos, las participantes muestran actitudes lésbicas sexualmente insinuantes o explícitas, acariciándose y besándose mientras bailan.