Café com leite

No obstante, este cambio político no modificaba las relaciones de clientelismo y poder mantenidas por los grandes terratenientes que dominaban la economía brasilera, la cual era fundamentalmente agraria y basada en la exportación de materia prima.Cabe indicar que tanto el café como el ganado vacuno se hallaban establecidos en regiones con climas cálidos pero templados (como las planicies del centro y sur de Brasil), sin riesgos de sufrir daños por graves sequías como sucedía con el azúcar de Bahía o Pernambuco, además que los productores paulistas y mineiros contaban con los puertos de Sao Paulo y Río de Janeiro para exportar sus productos, lo cual les permitió sobrellevar el breve apogeo económico del cultivo del caucho en las selvas ribereñas del río Amazonas (apogeo que terminó bruscamente en 1911).No obstante, desde 1870 habían ocurrido continuas sequías en dicha región, lo cual dificultaba mantener una producción azucarera que satisficiera las exigencias de la exportación al extranjero.Esto redujo visiblemente la riqueza de las élites terratenientes del norte y las relegó a un papel político secundario durante la República Velha.El coronelismo debía su nombre a que los hacendados locales eran usualmente reclutados por los gobernadores estaduales para formar tropas contra bandoleros o sublevaciones políticas, y allí el máximo grado militar que podían obtener estos terratenientes era el de coronel.