Originalmente, el cable de acero fue un invento del ingeniero alemán, Wilhelm Albert.
Cuando un cable nuevo entra en servicio, los esfuerzos que soporta le producen una disminución del diámetro, acompañada de un aumento en su longitud, a causa del asentamiento de los distintos elementos que forman el cable.
Los fabricados con alambres gruesos resisten bien el desgaste por rozamiento, pero tienen una gran rigidez y son poco resistentes a la flexión.
Generalmente, el alma de los cables es de fibra textil,siempre y cuando no se trabajen en ambientes con un elevado porcentaje de humedad y elevadas temperaturas, ya que estos factores difieren con la resistencia del alma, haciéndola débil hasta punto tal que se pueda cortar.
En los cables corrientes, las distintas capas de alambres que forman los cordones tienen pasos diferentes.
Los cordones, a su vez están colocados en el cable en forma de hélice alrededor del alma.
su contenido en carbono varía generalmente del 0,3% al 0,8% obteniéndose dentro de esta gama los aceros dulces, semiduros y duros.
Si esta construcción es ya un cable terminado, los alambres de las diferentes capas se arrollan en sentido alternado a izquierda y derecha y entonces se llama cable espiral.
En general los cables espirales resisten bien el desgaste por rozamiento al tener una superficie aproximadamente cilíndrica y muy lisa.
Su aspecto exterior es igual al de los cables normales y es preciso observar su sección para poderlos diferenciar.
En resumen estos cables se emplean para levantar cargas no guiadas (que pueden rotar libremente), con alturas de izamientos considerables.
En primera instancia es conveniente considerar la experiencia obtenida con cables usados anteriormente en la misma instalación o equipo.
La variables que inciden en la determinación son: Se recomienda no utilizar cables antigiratorios cuando la carga está guiada (impedida de rotar) y además conviene tener presentas algunas precauciones específicas adicionales.
Deben ser consideradas todas las recomendaciones mencionadas para la manipulación de cualquier cable, con especial atención, a que el cable antigiratorio debe mantenerse siempre acondicionado en bobinas y no en rollos.
Cuando es inevitable hacer un rollo, el mismo debe ser debidamente zunchado o atado, y al desenrollarlo se debe hacer rodar el rollo en forma vertical hasta que el cable esté completamente en línea recta en el suelo.
Se debe prestar especial atención a no introducir torsión en el cable durante el manipuleo o la instalación.
Todos los extremos deben llevar una, dos o tres sólidas ataduras con alambre, según el diámetro, excepto que los mismos se encuentren soldados.
Se debe poner énfasis en evitar las prácticas operativas que posibiliten llegar a dichas situaciones.
Una práctica desacertada es colocar uniones giratorias o destorcedores en el anclaje del extremo muerto.
Los extremos del cable deben estar firmemente anclados con la sección transversal completa y sólidamente retenida.
Si se usan terminales con cuña, es recomendable soldar las puntas del cable o adquirir el mismo con los extremos ahusados.