El M65 es la única pieza de artillería desde donde se ha disparado un proyectil con una ojiva nuclear.
Durante los 10 años que estuvo en servicio jamás fue usado en combate.
El ingeniero Robert Schwartz desarrolló los diseños preliminares basándose en el cañón Alemán Krupp K5, un cañón ferroviario que se empleó contra los desembarcos norteamericanos en Italia.
Dicha prueba sería la primera y única detonación nuclear disparada desde un cañón.
Continuamente cambiaban de posición para evitar ser detectados.