El CMX 600 fue el primer sistema de edición no lineal con acceso aleatorio del mundo.
Esto permitía optimizar los tiempos y las amortizaciones al ser un procesos más rápidos que los anteriores procedimientos anteriores, consistentes en desmontar la cinta, cortar los trozos correspondientes y volver a montarla en el magnetoscopio.
Además los dos sistemas eran compatibles gracias a poseer la misma pista con código de tiempo SMPTE, indica Ohanian (1996, p. 56).
[2] Consistía en dos monitores, uno para la imagen y otro para las órdenes, controlados por un lápiz electrónico.
[nota 1] En total almacenaba como máximo una hora de material bruto, lo cual le hacía idóneo para editar anuncios, pese a que también se utilizó para series televisivas.