Campsa
Originalmente fue una empresa mixta con participación minoritaria del Estado, que ganó la concesión en 1927 (renovada en 1947).En 1917 se empieza a debatir la idea de que España debía controlar los recursos energéticos.La creación de Campsa se dejó sentir en el progreso industrial español y principalmente en la industria refinadora.Estas empresas, la Shell y la Standard Oil, controlaban el 80% del mercado mundial del petróleo lo que llevó a que se iniciara y mantuviera una campaña diplomática contra el gobierno español y que se produjera un boicot en la venta de crudo a España.El presidente de Texaco, el pro-nazi Torkild Rieber, jugó un papel clave en las negociaciones.Bajo la dictadura franquista se mantuvo el régimen monopolístico instituido por Calvo Sotelo, aunque las relaciones entre CAMPSA y las autoridades no fueron idílicas.1] En 1947 se reorganizó el Monopolio de Petróleos mediante una nueva ley que devolvía al Estado la capacidad para otorgar concesiones destinadas a las actividades de hidrocarburos, mientras que aquellas que estaban relacionadas con la distribución y comercialización quedaban bajo la exclusiva competencia de CAMPSA.[10][11] Este yacimiento, situado en la provincia de Burgos, había sido descubierto en 1964 y puesto en funcionamiento tres años después.En 1981 se decretó la integración de la empresa en el Instituto Nacional de Hidrocarburos (INH),[12] que agrupaba a otras sociedades estatales del sector energético como ENPETROL o PETROLIBER.