Formó parte del ejército católico en la lucha contra los hugonotes en las guerras de religión.
Destinado a Isle-sur-la-Sorgue, inició, junto con su primo, G. B. Romillon, la Congregación de Sacerdotes Seculares de la Doctrina Cristiana, más conocidos como doctrinarios, para la formación religiosa de los laicos campesinos, la cual fue aprobada por el papa Clemente VIII en 1597.
Su cuerpo fue trasladado a Roma y descansa en la iglesia de Santa-Maria-in-Monticelli.
Fue declarado venerable por el papa Pío VII en 1821 y beatificado por el papa Pablo VI el 27 de abril de 1975.
[3] La Iglesia católica celebra su memoria litúrgica el 15 de abril.