Cáncer medular tiroideo

Se caracterizó por primera vez en 1959[1]​ y comprende entre el 3% a 4% de todos los cánceres tiroideos.

[3]​ Un segundo marcador es conocido como antígeno carcinoembriogénico (CEA), producido por el carcinoma medular de tiroides y liberado a la sangre, por lo que es útil como marcador tumoral.

Las mutaciones en el ADN relacionados al protooncogén RET, localizado en el cromosoma 10, conllevan a expresiones de una enzima mutada de las tirosincinasas que lleva el nombre del gen, es decir, RET.

Se presume que los síntomas son debido a una producción excesiva de calcitonina y, por lo general, difiere de la diarrea y enrojecimiento que acompañan a un síndrome carcinoideo.

Las operaciones quirúrgicas pueden ser efectivos si se detecta el tumor tempranamente, aunque existen riesgos de recurrencia.

[8]​ La nueva opción en estudio implica tratmiento con inhibidores de la tirosincinasa.