Los síntomas del cáncer de vesícula incluyen:[1] Estos síntomas son tardíos y de baja especificidad, debido a que cualquier patología que afecte la vía biliar puede llegar a producirlos.
El cáncer se encuentra sólo en los tejidos que constituyen la pared de la vesícula biliar.
En algunos casos también se realiza un estudio para evaluar la eficacia de la quimioterapia o radioterapia conjuntamente con la cirugía.
El cáncer es imposible de eliminar por completo de forma quirúrgica ya que se ha diseminado a los tejidos circundantes, pudiendo haber llegado al hígado, estómago, páncreas, intestino o nódulos linfáticos del área.
En el caso de que el cáncer sea irresecable, esto es, se haya extendido a los tejidos cercanos, se suele realizar una terapia paliativa con el fin de controlar o reducir los síntomas causados por el cáncer avanzado, la cual no curará la enfermedad.