Las monedas bullion,[1] también llamadas monedas de inversión, son monedas acuñadas en metales preciosos, generalmente oro y plata (aunque también en platino, paladio y rodio), no ideadas para la circulación, sino como una manera de almacenar el valor de los metales que las componen o como inversión.
El término bullion se refiere a lingote o barra de oro y bullionismo o metalismo, es las doctrina económica que definía la riqueza como la cantidad de metales preciosos de los que se es propietario.
Las monedas de plata bullion son normalmente fabricadas por empresas privadas, aunque también algunos gobiernos las producen.
Esta moneda, llamada Krugerrand, sigue acuñándose en la actualidad.
[2] Estas son algunas de las monedas bullion más comunes:[2]