Hoy en día, la mayoría de ellos son encontrados en el Territorio del Norte, teniendo Queensland la segunda población más grande.[1] Son objeto de controversia, ya que algunos ambientalistas y el gobierno los consideran como plagas y amenazas al ecosistema nativo,[2][3] pero también son valorados por otros como parte de la herencia histórica australiana, lo que ha llevado a muchos a trabajar para prevenir su trato inhumano o su exterminación, y para relocalizar brumbies que han sido capturados.En 1885, la revista Once a Month sugirió que brumbies era un término de Nueva Gales del Sur, y el poeta Banjo Paterson indicó en la introducción de su poema Brumby's Run publicado en The Bulletin en 1894 que Brumby era la palabra para caballos salvajes horses.[12] Es probable que los caballos hayan estado confinados principalmente a la región de Sídney hasta principios del siglo XIX, cuando los colonos cruzaron las Montañas Azules y abrieron la expansión hacia el interior.Es probable que algunos hayan escapado porque las cercas no estaban bien instaladas, cuando había cercas,[2] pero se cree que la mayoría de los caballos australianos se convirtieron en cimarrones porque fueron dejados en libertad en el campo y dejados a su propia suerte.[13] Esto pudo haber sido el resultado de ganaderos que abandonaban sus tierras, y por ende sus caballos, debido a las áridas y poco conocidas condiciones de la tierra que hacían dificultosa la agricultura en Australia.Sin embargo, Debido a que también tienen un potencial valor económico y cultural, el tratamiento de los brumbies es un tema complicado.El Departamento de Medioambiente y Conservación y Outback Heritage Horse Association of Western Australia (OHHAWA) están monitoreando estos brumbies en particular para asegurar un tratamiento adecuado de estos inusuales caballos cimarrones.[19] Se han capturados brumbies, colocado collares con rastreo por GPS sobre ellos y han sido utilizados en detalladas investigaciones comparativas sobre el efecto del terreno sobre la morfología y salud de las pezuñas de distintos caballos.Estos campamentos por lo general duran varias semanas, permitiendo a los jóvenes entrenar a un brumby salvaje hasta convertirlo en un tranquilo caballo de montar, al mismo tiempo que mejoran la autoestima del joven.Estas competiciones se llevan a cabo en Nueva Gales del Sur en las localidades de Dalgety, Tamworth y Murrurundi.[26] Varias asociaciones de ferias agrícolas de Nueva Gales del Sur, entre ellas Walcha, Bellingen y Dorrigo cuentan con clases especiales para los brumbies que sean registrados en sus ferias agrícolas todos los años.[14] En algunos casos, cuando los caballos cimarrones se ven asustados, puede que dañen infraestructura como abrevaderos, cañerías y cercas.[29] En algunos hábitats, las pezuñas de estos caballos salvajes compactan el suelo, y cuando el suelo se compacta, los espacios de aire son minimizados y no permiten que se acumule el agua.[31] El pisoteo de los caballos también produce erosión del suelo y daños a la vegetación, y debido a que el suelo no puede retener agua, el resurgimiento de las plantas se ve perjudicado.[14] Las áreas alpinas, como las del Parque nacional Kosciuszko, son especialmente vulnerables; la flora alpina de crecimiento bajo es muy vulnerable al pisoteo de los caballos, y los cortos veranos hacen que haya poco tiempo para que las plantas vuelvan a crecer y se recuperen del daño.[30] La exposición del suelo causada por los pisoteos, combinado con los nutrientes que son reciclados por el excremento de los caballos, favorece el crecimiento de hierbas, las cuales invaden la región y exceden en números a otras especies nativas, reduciendo su diversidad.[39] También pueden ser portadores de la fiebre por garrapata, la cual puede ser transmitida tanto a caballos como al ganado vacuno.La opinión pública es un factor determinante en los esfuerzos de control[41] ya que muchas personas apoyan la protección de los brumbies, incluidos los aborígenes, quienes creen que los caballos cimarrones pertenecen al campo.[47][48] El dispararles con personas entrenadas es considerado el método más práctico de control debido a su efectividad.[50] Disparar a los animales desde helicópteros permite realizar reconocimientos aéreos de grandes áreas para poder identificar las poblaciones más densas, y los tiradores pueden acercarse lo suficiente para poder apuntar bien a los animales y asegurar su exterminación.[52] Desde que comenzó la campaña para remover a los caballos del parque nacional, más de 400 caballos han sido atrapados pasivamente y retirados del parque, y 200 de ellos han sido ubicados en nuevos hogares.[55] Más de 60 brumbies que fueron capturados en la depresión del río Apsley han sido relocalizados.[56] Los brumbies, llamados "caballos salvajes del monte", son mencionados en el poema de Banjo Paterson, The Man from Snowy River.(referida como Run en inglés australiano) Los populares libros de Elyne Mitchell, Silver Brumby, fueron escritos para niños y adultos jóvenes.Estas historias fueron dramatizadas y convertidas en una película del mismo nombre (también conocida como The Silver Stallion: King of the Wild Brumbies), protagonizada por Russell Crowe y Caroline Goodall.
Brumbies pastando en
Alpine Way
cerca de Dead Horse Gap