Con la aparición de la epinefrina, efedrina y metilxantinas en 1920 se reemplazaron estos agentes anticolinérgicos naturales como broncodilatadores principales.
[4] Ipratropio es una solución que debe administrarse por inhalación a partir de un nebulizador.
Lo que llega, presenta una biodisponibilidad sistémica casi completa y alcanza la circulación en pocos minutos.
Debido a la estructura del ion amonio el cual tiene un carácter polar, el ipratropio no atraviesa barrera hematoencefálica.
Pero de ese 5% que si llega al blanco, genera una biotransformación a ocho metabolitos en el hígado donde puede tener una actividad anticolinérgica mínima o nula y es excretado por el riñón.
Ipratropio es un derivado sintético de la atropina pero es una amina cuaternaria, por lo que no atraviesa la barrera hematoencefálica, previniendo reacciones adversas en el sistema nervioso central (el síndrome anticolinérgico).
[13][14] El ipratropio induce la relajación del músculo liso bronquial, esta broncodilatación restablece las causa de la respiración sibilante, opresión en el pecho, tos y el intercambio anormal de gases presentes en los pacientes.
[17] El ipratropio puede ser combinado con el albuterol (salbutamol) o fenoterol para el manejo del asma y otras enfermedades pulmonares obstructivas, especialmente en individuos que han dejado de responder con un único medicamento.
En el asma infantil, la combinación de ipratropio, salbutamol y budesonida dos veces al día durante cinco días, resulta efectivo en el alivio de los síntomas, a diferencia del mismo tratamiento administrado solo una vez al día durante cinco días.
[20] Aunque es un poco más potente que la atropina, el ipratropio carece de acción sobre el SNC, pero tiene mayores efectos inhibidores sobre la transmisión ganglionar.
Tampoco se observaron efectos tumorigénicos ni cancerogénicos en estudios a largo plazo.
[29] Aunque en varios estudios preclínicos no ha sido demostrado algún riesgo del uso de Ipratropio durante el embarazo, tampoco se ha establecido su seguridad.
Sin embargo, en caso de presentarse, los síntomas pueden incluir sequedad bucal extrema, aceleración del ritmo cardíaco, dificultad para respirar, dolor de cabeza intenso, visión borrosa o pupilas dilatadas.
[4] El bromuro de ipratropio está disponible en varias presentaciones según el país y el laboratorio que lo produce.
Aunque los broncodilatadores sí son usados en las enfermedades donde las vías respiratorias de los animales (principalmente perros y gatos) se ven comprometidas como en el asma, bronquitis o EPOC; el Ipratropio no es de los más usados ya que se prefiere el uso de metilxantinas y simpaticomiméticos, ya que en medicina veterinaria han demostrado mayor efectividad y acción broncodilatadora.