Brock Chisholm
Fue el 13.º general cirujano canadiense y recibió numerosos premios, como Orden de Canadá, Orden del Imperio británico, la Cruz del ejército, y la Condecoración de Eficacia.[1][2][3][4][5][6] En 1915, a la edad de 18 años, durante la Primera Guerra Mundial, Chisholm se unió a la Fuerza Expedicionaria Canadiense (CEF), sirviendo en el 15.º Batallón como cocinero, francotirador, ametrallador y scout.Ascendió al rango de capitán, fue herido, y regresó a Canadá en 1917.Durante este tiempo, Chisholm desarrolló su postura que los niños tendrían que ser levantados en un "mayor entorno libre intelectualmente" como fuera posible, independiente de los prejuicios y sesgos (políticos, morales y religiosos) de sus padres.[1][4][5] Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, Chisholm rápidamente aumentó en importancia dentro del ejército canadiense y el gobierno.[3] Chisholm fue un controversial orador público, quien generó crítica del público canadiense por sus comentarios a mediados de 1940s, como que los niños no tendrían que ser animados para creer en Santa Claus, la Biblia o cualquier cosa considerada como sobrenatural.