El bordado de oro se hace generalmente sobre paño, terciopelo o seda.
El bordado puede estar matizado y en este caso se matiza con sedas de colores que, al bordar con ellas, dejan al oro más o menos descubierto.
Las carnes se hacen con seda floja en dirección contraria a la del oro con puntos enjabados muy finos.
Los cabellos se imitan con puntos enjabados según la dirección de los rizos.
A todo bordado hecho con hilillo de oro que imite al anterior se le llama bordado al setillo, aun cuando el setillo no exista.