Bisoprolol
A pesar de que el bisoprolol y otros beta bloqueantes cardioselectivos tienen poco efecto sobre receptores β2 en el pulmón, no son cardioespecíficos, por lo que deben ser administrados bajo supervisión médica en pacientes asmáticos.El bisoprolol puede ser administrado para el tratamiento de diversas enfermedades cardiovasculares, incluyendo la hipertensión arterial, enfermedades coronarias, trastornos del ritmo cardíaco, cardiopatía isquémica y posterior a un infarto agudo de miocardio.En pacientes con insuficiencia cardíaca se suele combinar un beta bloqueante como el bisoprolol conjuntamente con IECA, diurético o digitálicos.El bisoprolol tiene un mayor grado de selectividad por receptores β1 en comparación con otros medicamentos bloqueadores β1-selectivos, incluyendo metoprolol, betaxolol y atenolol.[3] En modelos animales el bisoprolol ha demostrado ser cardioprotector,[3] en comparación con propranolol mostró menos efectos sedantes y resultó reducir solo ligeramente la tolerancia a la glucosa.