Fue descubierta en 1956 en Birness, en Escocia (Reino Unido),[1] siendo nombrada así por esta localidad.
Es un óxido múltiple hidratado de manganeso con cantidades variables de calcio, sodio y potasio; con estructura molecular en hojas de octaedros.
[2] Además de los elementos de su fórmula, suele llevar como impurezas: cloro, cobalto, cobre, hierro, níquel, magnesio, azufre y silicio.
También aparece como consecuencia de la precipitación por bacterias.
Suele encontrarse asociado a otros minerales como: rodonita, rodocrosita, tefroíta, espesartina, alleghanyita, cummingtonita, óxidos del hierro y del manganeso, y en los nódulos polimetálicos marinos acompaña al carbonato cálcico.