Billy Bishop

Después de servir en la Canadian Expeditionary Force, fue aceptado en la Royal Flying Corps (R.F.C.)

En octubre de 1916 se sometió a las pruebas para convertirse en un piloto y fue aceptado.

Comenzaba a hacer vuelos en solitario (durante toda la guerra se caracterizó por eso), aunque no dejó de participar en formaciones.

Atravesando nubes y neblina divisó un campo alemán vacío; desalentado, siguió su camino hasta que encontró un segundo aeródromo (en Esnes).

Allí los mecánicos alemanes se preparaban para un nuevo día, y había algunos aviones fuera de sus hangares.

Un Albatros estaba a punto de prepararse para la defensa, pero solo alcanzó a elevarse 3 metros pues Bishop lo derribó; en otra nave provocó que se estrellarse contra un árbol después del despegue.

Fue ordenado dejar Francia el siguiente día, pues ayudaría a formar la Royal Canadian Flying Corps.

El día después del anuncio no lo desaprovechó: en 15 minutos de fiero combate derribó 5 aviones.

En opinión del piloto Eddie Rickenbacker, “Billy” era aún mejor que Manfred von Richthofen: Después de la guerra, Bishop se dedicó a los negocios y estuvo envuelto en labores de reclutamiento para la R.C.A.F.

Imagen de un Nieuport.