Benafarces

Así se describe a Benafarces en la página 170 del tomo IV del Diccionario geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de Ultramar, obra impulsada por Pascual Madoz a mediados del siglo XIX:[1]​ Villa con ayuntamiento de la provincia, administración de rentas, audiencia territorial y capitanía general de Valladolid (9 leguas), partido judicial de la Mota del Marqués (2), diócesis de Zamora (7).

Situada en un corto repecho, le combaten todos los vientos, y su clima produce intermitentes.

Tiene 90 casas, una fuente perenne, otra titulada Soto, conocida con el distintivo de la ictericia, por ser eficacísima para esta enfermedad y la de hipocondría; dos pozos públicos que se usan para los ganados, un hospital para pobres peregrinos, escuela de instrucción primaria común a ambos sexos, concurrida por 38 alumnos, y una iglesia parroquial (Nuestra Señora de la Asunción), servida por un cura de segundo ascenso y de presentación del duque de Medinaceli; el cementerio está en paraje que no ofende la salud pública; inmediata a la población hay una laguna que se forma de las vertientes y una ermita (la Virgen del Páramo), en la que estuvo antes la parroquia.

Confina el término con Villalonso, Pinilla, Pobladura, Villabarba y Tiedra; en él se encuentran varias canteras.

Sus caminos son locales y con mucho barro.