Benítez Cubero

Este último vende su parte en 1825 al también sacerdote Francisco Bueno, vendiéndola a su vez ese mismo año al canónigo hispalense Diego Hidalgo Barquero.

[6]​ Un año después le añade a las reses adquiridas varias de Felipe Salas (origen Hidalgo Barquero y Cabrera) y de Vistahermosa-Ibarra-Parladé.

[7]​ Tras la muerte de José Domecq en 1922, fue adquirida dos años después por Antonio Peñalver, quien la vende en 1929 a los hermanos Luis y José Pallarés Delsors, de los que en 1935 la compró D. José Benítez Cubero, abuelo del actual propietario y que dará nombre a la ganadería.

Atienden en sus características zootécnicas a las que recoge como propias de este encaste el Ministerio del Interior:[9]​ Por su constitución, es habitual ver a los toros de esta ganadería lidiar en corridas de rejones, aunque también se lidia a pie en diversas ocasiones.

[19]​ La corrida fue estoqueada por El Litri, Enrique Ponce y Finito de Córdoba.