El mismo debía ubicarse en la desembocadura del río Arapey y ser encomendado a la Santísima Virgen María.
[7] En 1840 el cuartel fue incendiado por militares argentinos, al mando del general Juan Pablo López, como venganza por la derrota en la batalla de Cagancha durante la Guerra Grande.
[7] Según el censo del año 2011 el pueblo contaba con una población de 1.926 habitantes.
Su economía se basa fundamentalmente en la agricultura, aunque la ganadería también está desarrollada en la zona.
La localidad dispone de un hospital, 2 escuelas públicas,(nº 6, Mtra.