Batalla de Cortrique

Entre sus objetivos estaba Flandes, rico y próspero país gracias a su industria textil.

La réplica no se hizo esperar y las tropas francesas, al mando de Carlos de Valois, hermano del rey, invadieron Lille, Cortrique, Béthune y Cassel.

La rebelión fue ganando terreno sobre todo en Brujas, liderada por un tal Pierre de Coninck.

Las milicias municipales flamencas se situaron en una meseta que dominaba la llanura de un río, el Groninga, que en ese punto desemboca en el Lys, y cavaron trampas de agua, las “loberas”, frente a sus líneas.

El enfrentamiento se inició con una descarga de los ballesteros franceses que hizo retroceder a los flamencos, cosa que los hombres a pie aprovecharon para preparar el asalto.

Los caballos no tardaron en quedar bloqueados y el condestable De Nesle murió.