Batalla de Venta y Media

En su reemplazo fue enviado el general José Rondeau, quien comenzó los preparativos para la tercera expedición al Alto Perú, lo cual motivó la oposición de Martín Miguel de Güemes, quien pretendía llevar a cabo una guerra puramente defensiva, según las directivas de San Martín.

Rondeau nombra entonces al coronel Martín Rodríguez en reemplazo de Güemes, y le ordena ingresar en el territorio altoperuano.

En octubre una fuerza realista que se estimaba en 300 hombres se había establecido a 20 km al norte de la vanguardia patriota, ubicada en Chayanta.

Sin embargo, no se produce el esperado efecto sorpresa y las tropas patriotas (superadas enormemente por las realistas) son completamente derrotadas.

Esta acción contribuyó a disminuir la ya alicaída moral del Ejército del Norte, concluyendo la tercera expedición en el desastre de la Batalla de Sipe-Sipe.