Batalla de Gindaros

[9]​ La paz parecía restablecida en al República romana,[10]​ por lo que Antonio se dedicó a una vida de placeres menoscabando su posición política.

[16]​[17]​ Sabedor que Antonio estaba en Egipto y Cayo Julio César Octaviano combatía a Sexto Pompeyo en Sicilia, convenció al rey de invadir Siria.

[18]​ No hubo dificultad pues los partos miraban en menos a los romanos desde Carras y estaban felices de sus guerras civiles.

[27]​ El cuestor Saxa salió de Antioquia a enfrentarlos pero la más numerosa y hábil caballería parta permitió su derrota.

Después de la batalla Apamea se rindió, cuando avanzó hacia Antioquia la urbe le abrió las puertas.

[29]​ Saxa logró huir a Cilicia pero hasta allí lo persiguió Labieno para darle muerte.

[25]​ Mientras, Labieno siguió hacia Asia donde se hizo con todo el territorio excepto Estratonicea; Planco huyó a las islas del mar Egeo ante su paso.

[25]​ Decidió enviar una tropa al mando de un mayordomo real con el mismo nombre para Judea.

Algunos enemigos en la ciudad se percataron, pero no avisaron a los sitiadores por misericordia con las mujeres y niños.

Mientras tanto, los partos saqueaba Jerusalén y solo se hicieron con 300 talentos del tesoro de Hircano.

Al primero le cortó las orejas, pues un mutilado no podía ser sumo sacerdote, pero el segundo prefirió golpear su propia cabeza con una gran piedra, quedando agónico.

[48]​ Enterado de la muerte de Fasael, fue a Alejandría, donde se entrevistó con Cleopatra pero la monarca quiso retenerlo mientras llegaba Antonio, pero Herodes se negó y decidió ir el mismo a Italia, sabiendo que su hermano estaba sitiado.

[59]​ El renegado pensó en presentar combate, pero al ver que sus tropas estaban abatidas por la derrota de sus aliados ordenó la retirada durante la noche.

Según Dion Casio, Labieno logró huir a Cilicia,[61]​ pero Demetrio, un antiguo liberto de César, le asesino por la recompensa ofrecida por Antonio.

[65]​ En ese lugar se ubican las Puertas Sirias, paso de montaña vital para poder continuar la ofensiva romana y recuperar la provincia homónima.

[67]​ Silón no pudo tomar la posición y casi murió, debiendo huir perseguido por el sátrapa.

Tras esto, Herodes decidió poner rumbo hacia Masada, uniéndosele judíos todos los días por su fama, antipatía al asmoneo o simple oportunismo.

Herodes tuvo que ir a esa ciudad con las cohortes romanas y cinco judías[73]​ (5.000 efectivos)[55]​ para limpiar el área de bandidos.

Cuando estos guerrilleros se enteraron de que había ocupado la población salieron a presentarle batalla campal.

[25]​ Las tropas de Saxa que salieron a su encuentro quizás sumaban dos legiones más auxiliares.

[5]​ En Gindaros Ventidio bien pudo reunir al menos cuatro legiones,[4]​[5]​ quizás hasta seis, lo que equivalían a 20.000 o 30.000 legionarios más caballería y honderos baleares.

[78]​ Conocedor que un tiranuelo regional llamado Farneo apoyaba a los partos, decidió tomarlo como hombre de confianza.

El príncipe parto decidió marchar hacia la planicie, dando tiempo a los romanos de reunir sus legiones.

[7]​ Los partos decidieron cargar con sus catafractas (caballería pesada) y arqueros a caballo a la vez (como en las Puertas Cilicias), ya que los nobles catafractas deseaban quedarse con el honor de la victoria pero no podían romper solos las líneas romanas.

[84]​ Entre los primeros en morir estuvo Pacoro,[85]​ y muchos de sus soldados lucharon desesperadamente por defender su cadáver pero ellos también fueron finiquitados.

El asmoneo quiso sobornarlo pero este se negaba a traicionar al idumeo, que ya sabía vencedor.

Herodes estaba harto y fue a Samaria, donde anunció que hablaría personalmente con Antonio en Samósata.

Herodes decidió escoltarlos y cuando llegó a la ciudad fue aclamado como un salvador por estos influyentes personajes.

[101]​[102]​ Durante el 37 a. C., Sosio, quien temía parecer que favorecía sus propios intereses porque significaba atraer la rabia de Antonio,[103]​ sometió a los últimos rebeldes sirios y cuando Antígono masacró a las tropas romanas en Judea, marchó contra él.

[107]​ Herodes había enviado embajadores y mucho dinero para convencer al triunviro de matar a su rival, pues temía que si lo llevaba a Roma este pudiera convencer al Senado de perdonarlo.

Evolución territorial de Partia.
Denario con el perfil de Antonio (izquierda) y al reverso una representación de Ventidio (derecha).
Mapa del Imperio romano en el año 125, se puede apreciar la provincia de Siria con sus principales ciudades.