El Grupo Panzer África, una fuerza germano-italiana comandada por Erwin Rommel (el Zorro del Desierto) intentó envolver al Octavo Ejército Británico de Bernard Montgomery.
En una nueva táctica, los blindados fueron utilizados con función antitanque, permaneciendo en sus posiciones para evitar ser destruidos, como había ocurrido en el pasado.
Dada la precaria situación de sus suministros, y al fracasar los ataques sobre las posiciones británicas, Rommel ordenó la retirada.
Montgomery no explotó su victoria defensiva, optando en su lugar por consolidar sus fuerzas para la Segunda Batalla de El Alamein.
Sin embargo, la 2.ª División Neozelandesa lanzó un frustrado ataque sobre posiciones italianas, sufriendo severas bajas.