No tiene carreteras ni vías asfaltadas para su acceso, aunque se puede llegar con vehículos hasta Bergua y hacer el resto de la subida andando.
Por su ubicación geográfica es el pueblo más al oeste de la Comarca del Sobrarbe, aunque social y geográficamente había pertenecido de siempre a los alrededores naturales del Sobrepuerto.
Tiene dos ábsides, cosa única entre las iglesias románicas de Aragón.
La nave central era originalmente de una planta, pero ampliaciones posteriores en los siglos XVI y XVII la alteraron.
El pueblo también tenía dos ermitas, dedicadas a San Blas y la Virgen.