La segunda fase de construcción se encuadra dentro del estilo renacentista.
La planta del templo está formulada en tres naves, con la central amplia y estrechas las laterales, y en tres tramos rematada por una cabecera con ábside poligonal compleja.
Templo está orientado al Este y torre de planta cuadrada, del siglo XVII, adosada a la fábrica de la iglesia en el ángulo Sureste.
La luz penetra desde el sur por ventanales de medio punto con tracería renacentista.
Al lado hay un cricifijo renacentista de mediados del siglo XVI.
También son reseñables los dos lienzos barrocos situados en la cabecera así como los atriles de bronce e estilo renacentista.
Trabajaron en esta construcción los escultuores Basterrechea y Larrea así como la casa Maumejean.
hay que destacar la ventana "estandarte" de la torre adintelada y con rica decoración.
Tiene elementos decorativos cerámicos, a la manera andaluza, y el remate es ochavado careciendo de pináculos.
Posteriormente, se colocó un nuevo Giraldillo, esta vez con la apariencia de la Fama, con una tropeta y una banderola con el lema "Tota pulcra est Maria".