Bar Giora
Al no haber muebles, los hombres se sentaron en el suelo en círculo y utilizaron un cajón como escritorio.El estado de cosas en los primeros años del siglo XX en el Imperio otomano era tal, que los agricultores judíos empleaban árabes para trabajar sus fincas y protegerlos, y a su vez estaban sujetos a los arrendatarios.Como lema optaron por una línea del poema de Yaakov Cohen, "Habiryonim": "A sangre y fuego Judea cayó, a sangre y fuego Judea se levantará otra vez".Los miembros juraron en secreto, disciplina, servicio desinteresado, devoción a la causa y lealtad.Cada miembro debía haber tenido al menos un año de experiencia agrícola.