Llamada también la Banda mágica, habitualmente se comporta como una banda VHF, o sea, que permite contactos a distancias apenas mayores que las de un contacto visual.
Quienes la usan afirman que esa impredictibilidad es parte de su magia.
Esta banda no tiene la misma extensión en todos los países, por lo que hay que preguntar a la asociación de radioaficionados local cuál es la banda de frecuencias aplicable a ese país.
Sin embargo, el modo Esporádico-E, que aparece preferentemente en verano, es sumamente apreciado por los contactos a grandes distancias (miles de kilómetros) que permite este modo.
Los límites exactos de cada banda varían fuertemente con cada país.