El Bank of Scotland plc es un banco comercial y de compensación, con base en Edimburgo, Escocia.
Asimismo, fue el primer banco en Europa que imprimió su propio papel moneda.
Aunque fue establecido poco después que el Banco de Inglaterra (1694), el Bank of Scotland era una institución muy diferente.
Si el Banco de Inglaterra fue establecido específicamente para financiar los gastos de defensa del gobierno inglés, el Bank of Scotland fue creado por el gobierno escocés para apoyar la economía de Escocia y se le prohibió prestar al gobierno sin una aprobación parlamentaria.
[1] La ley fundacional concedió al banco un monopolio en la banca pública escocesa por 21 años, permitió que los directores del bancos recaudaran un capital nominal de £ 1 200 000 libras escocesas (£ 100 000 libras esterlinas), concedió a los accionistas responsabilidad limitada y la cláusula final (revocada en 1920) mandaba que todos los propietarios (accionistas) de origen extranjero fueran naturalizados escoceses "para todo propósito e intención que quieran".