Una segunda limitación es la incapacidad de modelar estrategias que afectarían los precios históricos.
Finalmente, el backtesting, al igual que otros modelos, está limitado por un posible sobreajuste.
[1] A pesar de estas limitaciones, el backtesting proporciona información que no está disponible cuando los modelos y estrategias se prueban con datos sintéticos.
Para un valor en riesgo de 1 día al 99% comprobado 250 días seguidos, la prueba se considera verde (0-95%), naranja (95-99.99%) o roja (99,99-100%), según la siguiente tabla:[2] Para un valor en riesgo de 10 días al 99% comprobado 250 días seguidos, la prueba se considera verde (0-95%), naranja (95-99.99%) o roja (99.99-100%) según la siguiente tabla: En oceanografía[4] y meteorología,[5] el backtesting también se conoce como hindcasting: un hindcast es una forma de probar un modelo matemático; los investigadores ingresan en el modelo entradas conocidas o estimadas para eventos pasados y así analizar qué tan bien la salida coincide con los resultados conocidos.
Si la retrospectiva mostrara una respuesta climática razonablemente precisa, el modelo se consideraría exitoso.