Sus instrumentos principales fueron los órganos de antiguas iglesias y el piano.
Ese mismo año, tras una discusión, mató a su esposa con un hacha, debido a que ella lo había acusado de ser un pedófilo, y enterró el cuerpo en su jardín.
[1] En 2001 obtuvo un permiso de salida de la prisión, que aprovechó para huir y emigrar a Brasil, donde se casó en 2001 y empezó a trabajar en proyectos sociales en Belo Horizonte.
Fue descubierto y extraditado nuevamente a Alemania, donde cumplió el resto de su condena.
Conocidos son su Louva ao Senhor y Aquecendo Corações, la versión brasileña de los Let our hearts burn.