Asimismo, esta función de utilidad del dinero se suele asumir cóncava (ver aversión al riesgo).
¿Qué individuo está más satisfecho o reporta mayor utilidad después de haber jugado A?
La teoría prospectiva apuntaría por el contrario al individuo 2, que se ha visto favorecido.
Este ejemplo sugiere que la riqueza final no es un marcador adecuado de los cambios en el valor psicológico.
Los resultados indican rotundamente que no, pero esta evidencia no la puede explicar la teoría económica clásica puesto que el valor esperado de la lotería B tiene una ganancia de 100$ (0.5x1000)-(0.5x800).
La aversión a la pérdida parece jugar un papel en la explicación de numerosos fenómenos sociales.
Por poner un segundo ejemplo: En una campaña política, la medida de subir o bajar los impuestos no provoca el mismo efecto entre los votantes.