Generalmente, el vino auslese puede hacerse sólo los años de las mejores cosechas que han sido suficientemente cálidos.
Una pequeña proporción de las uvas puede verse afectada por la podredumbre noble en algunas regiones, aunque esto nunca domina el carácter del vino.
Auslesen pueden disfrutarse por sí solos como aperitivo o vino de tarde, pero usualmente maridan mejor con comida, particularmente los que exhiben las características campechanas de la cocina alemana.
Estos vinos, particularmente cuando se hacen con uva riesling pueden envejecer durante largos períodos de tiempo, a menudo diez años o más.
Como los vinicultores alemanes intentan lograr un nicho en el desarrollo del vino tinto, la clasificación de madurez auslese ha entrado en juego como el nivel ideal para producir Spätburgunder (pinot noir), particularmente en Rheingau, Pfalz, y Baden.