El candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Cristóbal Arias Solís, acusó que las elecciones fueron fraudulentas y se negó a reconocer la gubernatura de Villaseñor Peña.
El Congreso del Estado de Michoacán le concedió licencia del cargo durante un año y nombró a Ausencio Chávez Hernández como gobernador interino de Michoacán.
[4] En 1993 el Congreso del Estado renovó la licencia de Villaseñor Peña por un año más, manteniendo a Ausencio Chávez como gobernador interino.
Para 1994 Villaseñor Peña presentó su licencia definitiva del cargo de gobernador.
En consecuencia, y para evitar que Ausencio Chávez tuviera que ejercer como gobernador sustituto durante otros cuatro años, el Congreso del Estado decidió aprobar una reforma constitucional, adelantando para 1995 las elecciones para la gubernatura.