[2] Inteligencia militar ya había alertado al comandante de la base Girasoles con dos radiogramas alertándole sobre una posible retaliación de las FARC-EP por las operaciones que se estaban llevando a cabo en la zona.
Además información de reclutas infiltrados que habían estado en esa posición meses antes, le había permitido conocer a la guerrilla donde estaban los campos minados que protegían el perímetro de la base.
Sin embargo, los asaltantes lograron la sorpresa total, al atacar por donde menos se los imaginaba el encargado de la base.
Como consecuencia del ataque fueron asesinados el cabo segundo Wilmer Miranda y el soldado Edilberto Hoyos Oliveros.
Los soldados, Omar Augusto López Gómez, César René Gómez Gómez, John Jairo Ladino, José Ismael Mahecha Ramírez, José Luis Mahecha Urrego, Saúl Luna Gómez, Jorge Armando Martínez Cardozo, Albeiro Plazas Pinto, John Gutiérrez Sabala, Leonardo Perilla Ávila, Rodrigo Gutiérrez Tovar, José Rey Trujillo, Nelson Ricardo López Gavilán, Humberto Raúl López Llorente, el dragoneante Dany Martínez Serrano, y el cabo segundo Rober Ordóñez Guerrero, fueron secuestrados.