Actualmente es un pequeño poblado veraniego con cámpines, club de yates e ideal para la pesca.
Aunque no se recomienda la pesca a fondo, el uso de trasmallos sí suele ser un método mucho más efectivo.
1781 - Las milicias magdalenenses adquieren importancia por su ubicación estratégica, pues daban aviso si descubrían embarcaciones, a la Ensenada de Barragán.
1876 - En este año comienza a funcionar el saladero de la firma Santiago Rocca Hnos, asimismo en ese año se proyecta y habilita un camino carretero que conecta Atalaya con Magdalena, cabecera de distrito.
1877 - Se instala el último de los saladeros en Atalaya perteneciente al Sr. Pedro Bordatto.
Apoyan ésta hipótesis dos aspectos: Un pequeño pero muy importante capítulo que hace a la historia naval argentina transcurre no exactamente sobre las aguas del Río de la Plata sino sobre su costa.
Es importante destacar que el Río de la Plata, especialmente nuestra costa y la capital, había sido visitado en nueve oportunidades por piratas, bucaneros o filibusteros desde el año 1578 hasta 1719, con intenciones que distaban de ser amistosas.
Así, en un sitio casi desconocido, 100 km al sudeste de Buenos Aires, se levantó una atalaya.
Tenía unos quince metros de altura y se ubicó en la desembocadura del arroyo que adoptó el mismo nombre.
Para ese entonces la playa con marea alta permitía que barcos como goletas o sumacas entraran a la protección del arroyo y la costa.
Sí es real que muchos pueblos coloniales tuvieron origen en estos puestos de guardia.
Poco después se tiene en cuenta que la costa y arroyo Atalaya, por sus características hidrográficas podría ser un puerto natural para cierto tipo de embarcaciones.
En 1776, a unos 7 km al sur, ya existía el poblado de Magdalena y si bien se puede puntualizar que el origen de ésta podría ser anterior al año antedicho, lo que no se debe obviar es que la guardia de Atalaya fue el impulsor final magdalenense.
De acuerdo con los escasos datos, al parecer la guardia de Atalaya poseía dos cañones para su defensa, colocados a ambos lados del puesto sin conocerse si eran fijos o móviles.
Para la guardia también se tuvo en cuenta la caballería, patrullas y chasques con el propósito de dar aviso a Buenos Aires.
Más lo importante era que el Río de la Plata estaba bloqueado por fuerzas navales del Imperio.
Nótese que las naves de gran calado y porte no podían acercarse a la costa con marea normal.
Las lanchas que llevaron a la marinería francesa hicieron rumbo hacia la desembocadura del arroyo Atalaya y en ese punto trabaron combate con la guardia local que los rechazó en recio intercambio de fuego y enfrentamiento cuerpo a cuerpo.
El bergantín Nadine bombardeó la costa mientras tuvo suficiente agua, luego varó.
Hoy el avance inexorable del río sobre la tierra ha borrado los vestigios de un símbolo.
En Europa en el año 1884, se realizan pruebas para conservar las carnes por el sistema del frío.
El Ing. Tellier culmina con éxito dicho sistema quedando fuera de mercado la industria Saladeril.
Ese mismo año aparece el Frigorífico Armour, al que la gente llamó “el nuevo”, quedando Swift como “el viejo”.
Fueron sus fundadores: Luis Melonari, Justo Stinco, Benjamín Seresi, Rogelio Cincotta, Adolfo Landa, Néstor Cericotta, Remo Recagno, Enrique Hipólitto, Francisco Asti, Agustín Melonari, Alejandro Pandolfi y Enrique Gattini.
En 1949 la Comisión Directiva de Amor al Arte nombra bibliotecaria a la Sta Emma Crespi en forma “ad honorem”, quien dirigió a la entidad hasta el año 1991, (hasta la edad de 99 años), en una tarea elogiosa que le mereció diversos reconocimientos.