Ascensor espacial

Sin embargo, la idea de un ascensor espacial se remonta al 1895, concebida por el físico ruso Konstantin Tsiolkovsky.

[2]​ Los ascensores espaciales eran hasta hace muy poco un tema exclusivo del género de la ciencia ficción, pues ningún material conocido podía soportar la enorme tensión producida por su propio peso.

Edwards propone que el ascensor espacial se construya de manera análoga a como se construían los puentes en tiempos pasados: tendiendo una cuerda entre ambos extremos del obstáculo natural, y reforzar progresivamente la cuerda inicial con tramos cada vez más gruesos y resistentes.

El cable sería recuperado al llegar a la superficie terrestre y anclado en una plataforma flotante en algún punto del ecuador.

Asimismo, la Spaceward Foundation ha establecido diversos concursos y premios para quienes aporten mejoras para la construcción de dicho ascensor.

Un ascensor o elevador espacial terrestre consistiría de un cable fijo al ecuador de la Tierra y llegaría hasta el espacio. Al anclar un contrapeso a uno de los extremos (o alargando el cable hacia arriba), el centro de masa se mantendría arriba de la órbita geoestacionaria. La fuerza centrífuga debido a la rotación, nos asegura que el cable se mantendría alargado, contrarrestando la atracción gravitacional. Una vez arriba del nivel geoestacionario, las cargas transportadas sentirían una fuerza hacia arriba, ya que arriba de este nivel, la fuerza centrífuga es mayor que la gravitacional. (La altura de la órbita geoestacionaria relativa al diámetro de la tierra mostrado está a escala).
Estructura molecular de los nanotubos de carbono .