Lo más característico del arte cicládico del tercer milenio a. C. son las esculturas de mármol, más conocidas como figurillas, que tienen un tamaño pequeño o mediano, son antropomorfas y tienden al esquematismo.
Su presencia en las tumbas de cista sugiere que tenían una función funeraria pero también han aparecido en contextos habitacionales.
Los ídolos cicládicos aparecen también en algunas tumbas fuera del área de las islas Cícladas, como en Kumasa (Creta).
Su función no está clara y se ha sugerido que también tuviera funciones relacionados con rituales, o que se rellenara de agua para servir como espejo, entre otras hipótesis.
Hay diferentes tipologías entre las que se encuentra el tipo Kampos, que tiene una sola asa y la decoración compuesta por espirales en torno a una estrella central; y el tipo Siros, que tiene dos asas, decoración con círculos concéntricos o espirales, y a veces aparecen representados barcos o el triángulo púbico femenino.