Surgieron campeones e ídolos populares de diversos deportes, incluyendo el fútbol.La provincia de Buenos Aires le cedió a Arsenal unos terrenos en el predio Santa Catalina de Llavallol, hoy esquina Boulevard Santa Catalina y Libres del Sud, donde desarrolló sus actividades y erigió su cancha.En ese torneo el campeón fue el Club Flandria, mientras que Arsenal obtuvo 16 puntos; 1953 no fue trascendente ya que el equipo de Llavallol salió sexto entre siete equipos.En la nueva categoría militó por unos años hasta que, con marcada irregularidad, retomó a la Tercera de Ascenso en 1958.No solo padeció el descenso, sino que en 1959 se desafilió luego de disputar las primeras 14 fechas.Recién volvió a los torneos oficiales en 1962, con una campaña irregular que no le permitió clasificar para el Reducido en busca del ascenso, ocurriéndole lo mismo en 1963.Entre los jugadores que jugaron en Arsenal en esta época se destacaron Ángel Clemente Rojas,[2] Rubén Magdalena, Ricardo Alfredo Sotelo y Perandones, entre otros.El año en que más cerca estuvo de llegar a la B fue en 1967, cuando jugó la Reclasificación.