A Guerrico le seguía gustando interpretar folclore, lo que hacía como solista con el seudónimo de Armando Duval.
Cantó el tango El Tigre Millán, de Francisco Canaro pero el director advirtió que no se correspondía con su estilo, así que lo probó con otros temas, lo contrató y por su iniciativa pasó a llamarse desde entonces Armando Guerrico.
Dejó a Salamanca en 1963 y continuó su carrera como solista, realizando trabajos con varias agrupaciones entre las cuales se contaron la de Oscar de la Fuente con quien grabó en 1957 Bomboncito y No digas que no, una guarania en tiempo de tango del director acompañante y Lorenzo Spanu en el sello Doma y, de los mismos autores, dos años más tarde, Melodía para una novia, en el sello Forever.
Con Roberto Zanoni formó Los Cuatro para el Tango, hicieron giras y grabaron dos discos de larga duración.
Guerrico seguía cantando folclore en fiestas y reuniones; en 1970 hizo su última presentación profesional en el género en Mi Refugio, un local ubicado a metros de Radio El Mundo y usó el nombre artístico de Armando Duval.