Armand Seguin se desvinculó de la investigación en 1794, sin embargo todavía apareció un trabajo suyo, en colaboración, en 1804.
[1][2] Como Francia estaba envuelta en grandes guerras su invención cobró una importancia relevante en el equipamiento de la caballería y del ejército franceses.
El mérito de descubrir que es un alcaloide corresponde al farmacéutico alemán Friedrich Wilhelm Adam Sertürner .
Artículo publicado en conjunto con Lavoisier acerca del calor y la respiración animal, donde hace de cobaya humana.
Este trabajo vino a refutar la teoría del calórico, pero se basa fundamentalmente en las ideas de Lavoisier y en la colaboración inestimable de su esposa, que le tradujo y criticó obras vitales para el trabajo del sabio.