Un arma de electrochoque es un arma diseñada para incapacitar a una persona o animal mediante descargas eléctricas que imitan las señales nerviosas y confunde a los músculos motores, principalmente brazos y piernas, inmovilizando al objetivo temporalmente.
El arma envía las cargas eléctricas a los electrodos, que al ser proyectados sobre una persona, descontrolan los músculos motores incapacitándola.
Tiene un extremo de metal compuesto por dos electrodos conectados a una batería que incluye el artefacto.
Tienen a veces una opción de arco voltaico visible y ruidoso que se utiliza para advertir al contrario.
[8][9] Tras el fallo del tribunal porteño integrado por 3 jueces, el país fue denunciado ante la corte Interamericana de derechos humanos.
[19] Sin embargo, desde el asesinato de una mujer policía en servicio, los dispositivos TASER han estado en uso nuevamente por las fuerzas policiales locales, desde 2010.