El Arco de la Villa es una antigua muralla medieval que sirve como entrada al casco antiguo.
Antiguamente se llamaba puerta de Vejer, ya que era donde comenzaba la travesía hacia el pueblo vecino.
Es la única de las cuatro puertas de entradas al pueblo que mantiene sus murallas.
Data del 1502 cuando el Duque Don Juan de Guzmán ordenó amurallar Conil por el peligro de que atacaran los árabes.
El Arco está ubicado en el centro histórico de Conil de la Frontera, lindando con la Calle Capitán Pérez Moreno y con la Plaza de España dentro del casco antiguo, y con la Calle la Virgen a las afueras.