Con sus hermanos Arthur and Carl Ludovico, empezó a experimentar con fotografía y cinematografía.
En el mismo año le nombraron editor de arte y teatro en el periódico "L'Artista".
En ella examinaba política, música, teatro y arte dentro del punto de vista futurista.
En el mismo año funda el estudio de cine "Novissima-Film", y produce algunas visionarias películas futuristas incluyendo "Thais" (dicho también "Perfido incanto").
En 1932 es nombrado consejero de la "Corporazione dello Spettacolo" ("Corporación del Entretenimiento").