En 1726 el médico sueco Johann Jakob Scheuchzer describió un fósil como Homo diluvii testis (hombre testigo del Diluvio), creyendo que eran los restos de un ser humano que se ahogó en el diluvio bíblico.
El museo de Teylers en Haarlem obtuvo el fósil en 1802, donde todavía se exhibe.
En 1812 el fósil fue examinado por Georges Cuvier, quien lo reconoció como una salamandra gigante.
Años más tarde, en 1931, fue bautizada por Holl como Salamandra scheuchzeri, en honor a Scheuchzer y en 1937 Tschudi la asignó a un nuevo género, Andrias ("imagen del hombre"), resultando la combinación Andrias scheuchzeri (el hombre de Scheuchzer).
Actualmente se reconocen las siguientes especies para el género: De igual manera se tiene la constancia de las siguientes especies extintas: