Esta sala pasó a llamarse Capilla de los Españoles a partir del siglo XVI por ser frecuentada por Leonor Álvarez de Toledo, Gran Duquesa Consorte de Toscana y su séquito.El nivel artístico de las pinturas no se considera muy elevado, pero su vivacidad y riqueza de detalles siempre han despertado gran interés.Giorgio Vasari atribuyó esta obra a Simone Martini y a Taddeo Gaddi, y John Ruskin las hizo famosas con sus elogios, pero su atribución correcta se debe al historiador artístico del siglo XIX Giovan Battista Cavalcaselle.La flaqueza del artista, que trabajó en paralelo con Orcagna, es la falta de motivos originales seguida de una excesiva repetición en el esparcimiento de los colores y los detalles del modelado, aunque la grandiosidad de la representación y la vivacidad del color, influida por la Escuela Sienesa, en especial por Bartolo di Fredi más que por Ambrogio Lorenzetti, despiertan la admiración del observador.Las paredes izquierda y derecha están cubiertas por las escenas más grandiosas, con la Exaltación de la Orden Dominica a la derecha y el Triunfo de Santo Tomás a la izquierda.
Frescos de la Capilla de los Españoles,
Triunfo de Santo Tomás
(detalle).