En 1990, viaja a Perú donde escala en estilo alpino el Ranrapalca Sur y la ruta Ferrari del Alpamayo, pero ya antes había realizado innumerables ascensos y escaladas en las montañas de México.
En 1991, Carlos Carsolio lo invita a escalar en Baffin donde consiguen varios primeros ascensos mexicanos y un primer ascenso mundial que significaron grandes logros tanto para Andrés como para Carlos.
Viaja nuevamente con Carsolio pero en esta ocasión a la Patagonia y realizan el primer ascenso mexicano al Cerro Torre, considerado por muchos expertos como la montaña más difícil con sus 800 metros de pared de granito.
[1] En 1995 realiza una fuerte actividad en los Himalayas, Cho Oyu, Broad Peak y en 1996 hace un intento al Everest sin oxígeno alcanzado la cota de los 8400 m Regresa en 1997 y escala el Everest,[1] en esta ocasión con oxígeno.
En 1999 regresa al Cho Oyu trabajando como guía; escala esta montaña en 12 horas del campo II-cumbre-campo II en solitario.