Ana Pinto

Con dieciséis años dejó el instituto de Paterna del Campo y siguiendo la costumbre familiar, comenzó a trabajar en la recogida de los diferentes frutos según la época el año, alternando estos periodos con el cobro de la renta agraria cuando no había faena en el campo.

Pinto y su compañera Najat Bassit entraron en contacto con estas mujeres, documentaron los casos de abuso y maltrato e interpusieron denuncias ocultando los nombres de las denunciantes ante el temor de que no volvieran a ser llamadas para trabajar.

La intervención de esta pidiendo explicaciones a los sindicatos que las representaban por no haber luchado por sus derechos despertó mucho interés y las trabajadoras decidieron abrir un perfil en la red social Facebook al que subieron un vídeo explicativo de su situación que se hizo viral.

También se organizaron para ayudar las compañeras enfermas de cáncer sin acceso a sanidad.

Tras la reunión, el Ministerio de Trabajo se comprometió a reforzar las campañas para perseguir las conductas que lesionaran los derechos de las trabajadoras del campo.